Gli interventi di questo numero tematico propongono una conversazione urgente che cerca di rendere visibile e analizzare i modi sistematici e sostenuti in cui i diversi processi di resistenza e rivendicazione vengono attaccati attraverso nuovi repertori di silenziamento, criminalizzazione, persecuzione e omicidio di chi scommette maggiormente sui modelli compatibile con il mantenimento della vita. I casi di Messico, Guatemala, Honduras, Colombia, Venezuela, Ecuador, Perù, Cile, Argentina e Brasile che sono raccolti qui stabiliscono una chiara relazione tra estrattivismo ed espropriazione. Gli articoli trattano anche di processi di cura e difesa del territorio condotti in contesti di crescente assedio e vessazioni. Di fronte a questo scenario, la capacità di disobbedienza, la costante ricerca di spazi di resistenza e la riconfigurazione della distruzione che l'estrattivismo lascia dietro di sé ci mostra non solo la forza che questi individui, gruppi e organizzazioni hanno, ma anche il crack che aprono all'esistenza di altri modi di vivere. In definitiva, ci permettono di immaginare il futuro al di fuori della violenza estrattivista.
Dossier "Violencias contra líderes y lideresas defensores del territorio y del medio ambiente en América Latina"
Autores Varios
LASA Forum, 50:4 - 2019 - 80 pp.
Download:

Los artículos de este número temático proponen una conversación urgente que busca hacer visible y analizar las maneras sistemáticas y sostenidas a través de las que se atacan distintos procesos de resistencia y reivindicación mediante nuevos repertorios de silenciamiento, criminalización,persecución y asesinato de quienes le apuestan a modelos más compatibles con el sostenimiento de la vida. Los casos de México, Guatemala, Honduras,Colombia, Venezuela, Ecuador, Perú, Chile, Argentina y Brasil que acá recogemos establecen una clara relación entre extractivismo y despojo. Los textos también hablan de procesos de cuidado y defensa territorial liderados en contextos de cada vez mayor asedio y hostigamiento. Frente a este paisaje abrumador, la capacidad de desobediencia, la constante búsqueda de espacios de resistencia y la reconfiguración de la destrucción que deja el extractivismo a su paso nos muestra, no solo la fuerza que tienen estos individuos, colectivos y organizaciones, sino también la grieta que abren para que existan otras formas de vivir. En últimas, nos permiten imaginarnos futuros por fuera de las violencias extractivistas.